Empecemos con el presidente, el primer argentino (después de Messi y el Papa), el encargado de abrir la temporada de pileta en el Congreso, donde sobran pileteros. Y la siguiente pregunta ¿Qué pasa General, que está lleno de tibios el gobierno nacional y popular? Parafraseando, reinventando, reperfilando una vieja consigna del peronismo que recriminaba a Juan Domingo haberse volcado hacia el ala derecha del partido, en su último mandato. Ahora, unas cuántas décadas después, podríamos preguntarnos por qué hay figuras del gobierno tan tibias dando declaraciones por los diferentes medios de (in)comunicación, instalados en el gobierno actual. La intención, imagino / interpreto, es mostrarse conciliador, un gobierno que abre el juego y que no es para nada confrontativo, que está lejos de la beligerancia con la que se designa al Kirchnerismo duro. Pero me da la sensación de que con esos movimientos algo se pierde ¿Será que no son tiempos de épica? Perdón, somos como Odiseo volviendo a casa, pero tratando de negociar con una Aerolínea de segunda categoría, un viaje mucho más tranquilo. En mardel, me quedo con dos ejemplos:
- Por un lado Marán. El ex director del Auditorium que designara Silvana Rojas, vuelve recargado. Ahora dice que quiere hacer lío, que necesita esta última experiencia de gestión pública en su vida, para que su autobiografía tenga algún sentido. Y que él ya sospechaba desde el primer día, que aquel affaire con Cambiemos no terminaría bien. Pero esta es su hora, porque se dice nac y pop, y quiere hacer “quilombo”, que el Auditorium abra sus puertas al universo entero. Ojalá que no esté asumiendo con otra premonición catastrófica inconfesable.
- Y también estuvo Ricardito Alfonsín, que se vino a la (in)feliz antes de salir rumbo a España, donde le espera un cómodo exilio como embajador. Otro dirigente político que ocupara espacios que mejor hubiese sido quedarse en Chascomús, en la casa paterna. Pero ahora, finalísima finalmente, encontró su gobierno indicado, que tiene su ADN y el de una rama del radicalismo. Pero claro, habría que ver si hay árbol ahí. Y si no hay, bueno, plantemos lo que se pueda y tratemos de acomodarnos, porque el invierno es largo, hay coronavirus y el mosquito con dengue parece estar tejiendo pulóveres para seguir sobreviviendo.
Bueno sí, a lo mejor me equivoco, porque equivocarse es divino y pedir perdón, una mierda. Prometo que voy a tratar de ser más tibio y paciente con el presidente, el gobernador y el intendente. Voy a intentar fumarme a estos voceros inesperados, que se alzaron con premios demasiado elevados. Lo acepto, vamos, es tiempo de baja intensidad, algo así como mi vida sentimental / amorosa. Tal vez pueda dar un discurso, una vez por año, a todes mis acreedores sentimentales, así ya van sabiendo a qué atenerse. Espero contar con voceros más confiables y haber maquillado un poco los números rojos.
Como sea, hay que rescatar el concepto de "solución ordenada" que propuso Alberto Fernández ¿Qué quiere decir eso? Habrá camino para recorrer y para repensar, porque las soluciones son buenas o malas, importa menos si hubo orden o no. Eso sí, aplaudo, celebro y me emociono con la propuesta de la legalización del aborto. Máxima batalla en materia de derechos humanos, que se librará en la calle y en todos los espacios públicos y privados del país, en lo que queda del año.
Una más sobre el presidente: ¿En serio van a construir un busto de Carlos Menem en la Rosada? No sé quién habrá hecho la propuesta, pero me da la sensación de que eso es querer que te vaya mal. Algún asesor, alguna asesora, por favorcito, adviertan al presi. Igual, ya sé - no me volví gorila de repente - peor es tenerlo al yeta de Maurizio. Quédense tranquilos, sé perfectamente bien cuál es el mal mayor.
De vuelta a Mar del Plata- Batán. Resulta que el verano que no fue, ahora que se terminaron las vacaciones, es. Siempre a destiempo. Como una especie de broma macabra del universo, los mejores días de verano, siempre serán los de marzo. No para el ex intendente Arroyo, que volcó su coche, igual que lo hiciera con la ciudad. A lo mejor debería haber arreglado los baches de las calles en el Barrio Rivadavia. El karma es así.
Para poder sobreponerse a las situaciones cambiantes de la vida, resulta fundamental aprender a manejar registros. Y sobre todo, hay que hacer un esfuerzo enorme para no confundirlos, como el caso de la persona que se tienta de risa en los velorios, o no puede dejar de hablar de parientes muertos en los cumpleaños. La vida es esa mezcla de registros, que suele durar un ratito, pero que se descubre real recién cuando alguna parte del cuerpo duele mucho. Y la verdad que en la ciudad (in)feliz duele mucho, duele todo, duelen el cuerpo el espíritu, los huesos, el alma, la mente, el corazón y el hígado, porque los femicidios continúan, porque el conservadurismo patriarcal nos tiene hundides en la peor mierda, porque ya no se aguanta más. No hay consuelo, porque no hay sanación, en la memoria se siguen apilando cuerpos mutilados, maltratados, destrozados. Y les que quedamos perdemos fuerza, perdemos vida. Y no queremos más, no queremos más femicidios, no queremos más patriarcado, no queremos más machismo, no queremos capitalismo reptiliano. Y que quede claro Y SE DIGA FUERTE: JUSTICIA POR JORDANA RIVERO Y APARICION CON VIDA DE CLAUDIA REPETTO. Y PARA LAS AUTORIDADES DEL GOBIERNO MUNICIPAL, PARA EL INTENDENTE: ATENCIÓN, COMPROMISO Y PROPUESTAS INTEGRALES, PROFUNDAS, PARA QUE, AL MENOS, COMENCEMOS A VISLUMBRAR UNA SALIDA A ESTE INFIERNO.
Último momento, cambio de registro: Parece que llegó el primer infectado del virus made in China al país. Al fin, para la tranquilidad del (?)periodismo y la alta suciedad, estamos a la moda. Ya somos parte del mundo, podemos descansar en paz. Y esto me trae a la memoria un recuerdo que no tiene mucho que ver con nada, porque es estrictamente deportivo. Es un acontecimiento que ocurrió en el año 1972: El sanjuanino Goyo Peralta y su pelea con Muhammad Ali ¿Por qué carajos traigo este episodio? Quizá porque puede ser una metáfora de algo, ¿no?... No. En realidad, se trató de una pelea medio amistosa, una suerte de exhibición fuerte, en la que un peleador argentino le hizo frente a la leyenda máxima del boxeo mundial, perdiendo decorosamente por puntos, en fallo unánime. Entonces, les argentines, ¿seremos tan importantes? O solo nos llaman a pelear cuando no hay otre disponible, con la seguridad de que siempre vamos a perder. Tal vez, solo seamos el reservorio del mundo, un granero vacío y envenenado, en donde solo queda gente desesperada, dispuesta a cualquier cosa por tratar de trascender, o dispuesta a trascender para hacer cualquier cosa. Y con este marco, este contexto mundial, nacional y local, solo nos queda seguir esperando la vuelta del Godot del barrio Rivadavia, y que por favor no traiga el Coronavirus en el sombrero.
*PD: Yo no tengo la culpa de que todas las cosas sucedan en el Barrio Rivadavia, lo juro. Y para terminar dejo un temazo de Juana Molina que me hizo feliz el domingo pasado, a eso de las cinco de la mañana, en el que fue el recital más retardado de la historia...
Les esperamos, humildemente, Scardanelli
**(Publicado originalmente el 05/03/2020)
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